Esta frase alberga buena parte del sentido de nuestra organización sin ánimo de lucro. La herramienta es la música, la música entendida como terapia. Nuestras competencias están abaladas por la experiencia de la práctica clínica, la docencia y la investigación. Los premios conseguidos, los reconocimientos, indican que vamos por el buen camino. Pero en el fondo, los proyectos que tutelamos son eficaces porque las personas que están en ellos saben que cuidan de personas.

Ese es nuestro sello. Atender con mimo y cuidado. Escuchar y acompañar.

Es sin duda una vocación de servicio que se dinamiza desde el respeto, la empatía y la compasión absolutos hacia quienes llegan a la orilla de nuestros instrumentos esperando esa nota capaz de ayudarles a reafinar el sentir, la salud, el vivir.

Cuidamos de otros guitarra en mano. Compartimos el espacio de un teclado y reunimos las manos al compás de la percusión porque la música, el espectro sonoro